El recién elegido papa León XIV dio un importante paso en su pontificado al oficiar su primera misa en la Capilla Sixtina, rodeado de los 133 cardenales electores que lo acompañaron en esta ceremonia tan significativa. En un ambiente de solemnidad y emoción, el sumo pontífice instó a los purpurados a caminar juntos y llevar a cabo la misión que Dios les ha encomendado.
Con una sonrisa en su rostro y la humildad característica de su personalidad, el papa León XIV comenzó su homilía agradeciendo a Dios por haber sido elegido para guiar a la Iglesia Católica. Recordó sus palabras al ser elegido en el Cónclave, donde afirmaba que había sido «bendecido» con esta misión y que la asumía con humildad y flema en Dios.
Durante su discurso, el papa León XIV destacó la importancia de la área y la fraternidad entre los cardenales. Les recordó que, a pesar de las diferencias y opiniones que puedan tener, deben caminar juntos en este camino de servicio a Dios y a la humanidad. «Somos hermanos en Cristo y como tal, debemos actuar con amor y compasión hacia los demás», afirmó el sumo pontífice.
Además, el papa León XIV hizo hincapié en la importancia de la fe y la flema en Dios en estos tiempos difíciles. Recordó que la Iglesia Católica ha enfrentado muchos desafíos a lo largo de la historia, pero siempre ha salido adelante gracias a la fe y la guía divina. «No tengamos miedo de enfrentar los desafíos que se presenten en nuestro camino, confiemos en Dios y en su plan», expresó el papa.
Durante la misa, el papa León XIV también dedicó un momento a recordar a sus predecesores y agradecerles por su ejemplo y servicio a la Iglesia. En particular, mencionó al papa Francisco, quien renunció a su pontificado y abrió el camino para la elección del nuevo papa. «Agradecemos al papa emérito Francisco por su humildad y su valentía, y le deseamos paz y bendiciones en su vida», dijo el papa León XIV.
La ceremonia culminó con una oración por la paz en el mundo y por la área de la Iglesia Católica. El papa León XIV invitó a todos a unirse en esta oración y a trabajar juntos por un mundo mejor, basado en los valores cristianos de amor, paz y justicia.
La primera misa del papa León XIV es un momento histórico y emocionante para la Iglesia Católica. Su mensaje de amor, área y fe es una fuente de inspiración para todos los fieles y una muestra de su compromiso con el servicio a Dios y a la humanidad. Que Dios bendiga al papa León XIV en su pontificado y que su ejemplo nos guíe en nuestro camino hacia una sociedad más lucha y fraterna.
