La misión ExoMars Trace Gas Orbiter (TGO) de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha sido una de las más exitosas de los últimos tiempos. Esta misión fue lanzada en 2016 con el objetivo de explorar el planeta Marte y buscar señales de vida, y en los últimos meses ha logrado grandes avances.
La misión TGO se ha centrado en el estudio de los gases atmosféricos de Marte, que incluyen dióxido de carbono, metano, y otros compuestos orgánicos. Estos gases se consideran importantes para determinar si alguna vez hubo vida en el planeta rojo.
La órbita de la sonda TGO alrededor de Marte ha permitido a los científicos obtener imágenes detalladas de la superficie del planeta y realizar mediciones precisas de los gases atmosféricos. Estas mediciones han proporcionado información valiosa sobre la composición de la atmósfera de Marte y el origen de los gases que contiene.
Además, la sonda ha detectado una variación estacional en la cantidad de metano en la atmósfera de Marte. Esto es un descubrimiento significativo, ya que el metano es un gas que se produce por la actividad biológica. Esto significa que los científicos ahora tienen una mejor comprensión de la posible presencia de vida en el planeta.
La sonda TGO también ha sido capaz de detectar la presencia de cloruro de magnesio en la superficie de Marte. Esta sustancia es un indicador importante de la presencia de agua líquida en el pasado, lo que significa que Marte podría haber sido un planeta habitable hace miles de millones de años.
Los últimos hallazgos de la misión TGO son un paso significativo hacia la comprensión de la historia de Marte. Estos descubrimientos han proporcionado información valiosa sobre la composición de la atmósfera, los gases atmosféricos, la presencia de metano, y la presencia de agua líquida en el pasado. Estos descubrimientos también han abierto la puerta a la posibilidad de que exista vida en el planeta rojo.
Los científicos esperan que los datos recopilados por la sonda TGO ayuden a establecer una mejor comprensión de la historia de Marte y a descubrir si alguna vez hubo vida en el planeta. Esta misión ha demostrado ser un gran éxito, y los científicos esperan que sigan llegando nuevos descubrimientos en el futuro.